Gaia tiembla.

Errante alucinado por entre los glaciares orientales del volcán Antisana, así es como me place estar, perdido entre la maraña de seracs y grietas que tientan ceder fácilmente a los invites de la bella Parca. Abajo a oriente se extiende la alfombra vegetal, húmedos parajes llenos de color y vida. Por entre el espeso bosque …